
El expresidente se mostrará junto a la titular del partido PRO, y su eventual grupo de trabajo. Un sector lo leerá como una «bendición», si embargo no habrá definiciones.
Mauricio Macri tendrá un gesto de fuerte valor político para Patricia Bullrich en la competencia para la candidatura presidencial de 2023: participará como invitado especial de la reunión que la titular del partido mantendrá el martes próximo con sus equipos de gobierno.
Allí, el exjefe del Estado escuchará a los dirigentes bullrichistas en lo que será una gran foto y toda una señala hacia la interna.
El encuentro, que se realizará desde las 10.30 en el Yacht Club de Olivos, será interpretado por muchos como una definición electoral de Macri, pero lo cierto es que el expresidente se mantiene equidistante, habla con todos, se muestra con el gran elector y coquetea con la idea de un “segundo tiempo”.
Hay quienes señalan que la presencia del exmandatario en la reunión de Bullrich será para compensar dentro de la interna partidaria su participación del 27 de abril pasado en una reunión del gabinete porteño, encabezado por Horacio Rodríguez Larreta. Para sus allegados, Macri es un “fundamentalista de la competencia” y no se jugará por ningún postulante del PRO. A más de una de la competencia, cuesta creer que Macri tomará partido y definiciones.
El exjefe de Estado viene dando señales ambiguas sobre la posibilidad de presentarse como candidato presidencial en 2023. Este lunes, durante una visita a Santa Fe en la que estuvo acompañado por Federico Angelini. Allí, consultado por la prensa dijo sobre una eventual candidatura: “Siempre ayudando… ¿Dónde? Dios dirá” y agregó: “Tenemos varios candidatos dentro de Juntos por el Cambio, eso es bueno y yo los apoyo a todos. Yo no me he anotado, me siento comprometido porque amo este país, pero hoy prefiero poner mi energía en que tengamos un plan coherente”.
Lo cierto es que Macri continúa sin definiciones, se muestra amplio y con todos los actores del PRO, juega en el interna de Juntos por el Cambio pidiendo diferenciación con la UCR, y hasta piensa en un “segundo tiempo”.