Martín Insaurralde y Fernando Espinoza son los jefes territoriales de los dos municipios más populosos del conurbano bonaerense: Lomás de Zamora y La Matanza, respectivamente; y ambos se encuentran comprometidos judicialmente. 

Espinoza, actual intendente matancero, fue procesado tras la denuncia que efectuó una ex empleada municipal por su puesto abuso sexual del mandatario. Por su parte, Insaurralde, ex intendente de “Empezó de nuevo con su agenda. El Concejo está más a favor que nunca. Nadie le va a pedir la cabeza, el tema puede influir en una futura candidatura”, analizó un dirigente peronista de La Matanza consultado sobre la situación de Espinoza. En Lomas de Zamora, donde ahora gobierna su alfil Federico Otermín, Insaurralde es investigado por la Justicia por presunto lavado de dinero y enriquecimiento ilícito desde que, tras el  escándalo conocido como “yategate”.

A pesar de estar comprometidos judicialmente, ambos dirigentes mantienen intacto su poder político en los dos distritos con más votantes en la sección electoral clave dentro del mapa de la provincia de Buenos Aires: la Tercera. 

Este jueves, el Concejo Deliberante de La Matanza discutirá el pedido de licencia que solicitaron los concejales opositores, sin la posibilidad de que prospere por la mayoría que ostenta el oficialismo. Espinoza continua con su gestión con total normalidad. 

“Empezó de nuevo con su agenda. El Concejo está más a favor que nunca. Nadie le va a pedir la cabeza, el tema puede influir en una futura candidatura”, analizó un dirigente peronista de La Matanza consultado sobre la situación de Espinoza.

Fiel a su estilo, y para intentar reconstruir su imagen, horas después del procesamiento Espinoza firmó con el Sindicato de Trabajadores Municipales de La Matanza un aumento de 15%. Voceros del palacio municipal, aseguraron que el tema de la denuncia dejó de mencionarse prácticamente y que “bajó la intensidad” del escándalo. 

“El es jefe, inclusive con respecto a la vicegobernadora [por Verónica Magario, exintendenta de La Matanza]. Es como un [Gerardo] Zamora”, lo definió un peronista de experiencia que lo comparó con el gobernador de Santiago del Estero, que alterna con su mujer, Claudia Ledesma, la silla de la gobernación santiagueña y una banca en el Senado. 

Además, Espinoza también cuenta con un puesto que le da más liderazgo a nivel provincial a pesar de haber sido procesado: es el presidente de la Federación Argentina de Municipios. 

Por su parte, Insaurralde sufrió desplazamientos de su riñón en la gestión municipal: Víctor Matassi, uno de sus abogados, y Alejandra Insaurralde, su hermana. Sin embargo, no fueron desplazados, sino reubicados y con el mismo rango.

Matassi era secretario técnico, administrativo y legal de la Municipalidad de Lomas de Zamora y fue nombrado asesor, dependiente del intendente municipal y manteniendo el “rango secretario”, según consta en el decreto de su designación. El reemplazo de Matassi será Aldana Scillama, una militante de La Cámpora que es cercana a Daniela Vilar, ministra de Ambiente bonaerense y esposa del intendente Otermín.

Alejandra Insaurralde también cambió de función el 1º de junio y fue nombrada asesora informática; era subsecretaria de Sistemas Informáticos. Al igual que en el caso de Matassi, el decreto que oficializa su reubicación aclara que mantiene el “rango subsecretario”.

“[A los cercanos a Insaurralde] No los echa, los desplaza. La influencia de Insaurralde sobre Otermín siempre fue total. La que sí quiere tallar es Daniela Vilar”, describe una fuente lomense que conoce el día a día de la política local.

Vale recordar, que Insaurralde fue el principal socio de Máximo Kirchner en su ascenso dentro del Partido Justicialista bonaerense, mantiene su influencia intacta en Lomas y hay fuentes que, incluso, afirman que concurre asiduamente a la municipalidad. Con la trama que comenzó con la difusión de sus fotos navegando por Marbella junto a Sofía Clerici, el año pasado tuvo que renunciar a su cargo de jefe de Gabinete bonaerense y a su candidatura a concejal.