El intendente de Tres de Febrero enfrenta semanas definitorias para su futuro político. Aún no decidió si será candidato nuevamente en el distrito. Su nombre suena fuerte en la estructura de Rodríguez Larreta para la provincia de Buenos Aires, ya sea en una eventual gestión de Diego Santilli como en el armado electoral de este año.
El intendente de Tres de Febrero Diego Valenzuela tiene por delante semanas de mucha intensidad política. El Jefe Comunal se involucra en el armado electoral de Juntos en la Provincia de Buenos Aires y acompaña al jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta.
Dentro de un mes, o quizás un poco más, pocas horas antes del cierre de listas del 24 de junio, Valenzuela definirá su busca ser candidato nuevamente en Tres de Febrero. Cursando el último año de su segundo mandato, la ley electoral le permite presentarse nuevamente ante las urnas. La incógnita se debe a que su nombre tiene cada vez más peso en el armado político y electoral de Rodríguez Larreta y Diego Santilli. De hecho, no pocos mencionan la posibilidad de que pueda integrar algún lugar de peso en el futuro gabinete nacional o provincial.
El domingo Valenzuela saludó el triunfo de Carlos Sadir en Jujuy, un hombre que integra el gabinete del radical Gerardo Morales. En las fotos de los festejos estuvo también Rodríguez Larreta. “Jujuy sigue por el camino del cambio, el orden, la paz y el progreso”, felicitó el intendente en sus redes.
Unos días antes había compartido una actividad con el diputado nacional Facundo Manes en Tres de Febrero. Presentaron el último libro del neurocientista y bajaron definiciones políticas. Valenzuela adscribió a muchas de las opiniones del médico, como establecer límites en la coalición de Juntos, advertir que no puede aceptarse la presencia de libertarios con declamaciones antidemocráticas, establecer un plan de estabilización donde se priorice el crecimiento y no el ajuste, y algunas otras más que ponen diferencias con el ala dura del PRO.
Valenzuela adscribe a la idea de sostener la unidad de Juntos. Sin embargo no esquiva la posibilidad de definir liderazgos en unas PASO. En esa charla con Manes, ambos coincidieron que las decisiones de estado no pueden tomarse midiendo encuestas, y pusieron los ejemplos de Alfonsín, Sarmiento o San Martín, “que si hubiesen preguntado a la opinión pública a través de las mediciones probablemente no hubieran podido hacer nada de lo que hicieron. Si Alfonsin hubiese seguido las encuestas, nunca se hubiese hecho el juicio a las Juntas”.
En definitiva, el rol del intendente parece ser el de mayor peso dentro del esquema político del larretismo en la Provincia de Buenos Aires. Las decisiones de fondo se toman en la mesa chica porteña, pero en el territorio pasando la General Paz Valenzuela es la herramienta más contundente. Sus movimientos llegan incluso hasta el interior de la Provincia.
En su alto perfil bonaerense aparece el reclamo al gobernador Kicillof por los fondos de coparticipación. Fue quien inició una demanda por datos alterados del Censo del 2010 que beneficiaron al distrito de La Matanza, en detrimento de los fondos que debían recibir todas las comunas.
En el medio, el intendente sigue con atención los avatares en el Concejo Deliberante local. En un año político el debate aparece recrudecido. Las discusiones por la Alcaldía en Loma Hermosa o la explosión en Santos Lugares tienen un dique de contención en la mayoría oficialista del cuerpo. Una estrategia del oficialismo local es dejar que el Peronismo levante el perfil. Creen que el vecino ya les bajó la persiana, y que cuanto más se muestren es mejor para la iniciativa electoral de Juntos.
En el cuerpo hay espadas como el presidente Juan Carlos Berns o el radical Marcelo Bello que deberían reelegir en estos comicios. Valenzuela aspira a que la dinámica nacional y bonaerense le permita lista única en el distrito. Deberá esperar a la estrategia territorial de Juntos. Es una preocupación de todos los intendentes amarillos en la Provincia.
La explosión en Santos Lugares ganó repercusión mediática. Enseguida Valenzuela salió a explicar las distintas iniciativas que tomó la gestión para asistir a las más de 50 personas afectadas, y los subsidios que entregó la comuna a cada damnificado.
En cuanto a la gestión local, Valenzuela se puso al frente del reclamo al gobierno nacional y al provincial para que se coordine la llegada de Gendarmería al territorio para responder al reclamo de seguridad de los vecinos.
También sigue con intensidad las obras de cercanía, iluminación y bacheo. Sabe Valenzuela que debe hacer equilibrio entre las demandas vecinales de la coyuntura y el debate de la estructura de su coalición. El rumbo de las próximas semanas está fijado: acompañar a Larreta y sostener a Santilli, y mostrar la presencia del estado municipal en cada calle del distrito.