Con 162 votos afirmativos, 54 negativos y 18 abstenciones, el kirchnerismo convirtió en ley la transferencia del transporte porteño. El legislador del PRO Cristian Ritondo adelantó que mañana debatirán un proyecto de declaración que intima a "reanudar las negociaciones" con el Gobierno
La Cámara de Diputados convirtió en ley el proyecto de ley que traspasa a la Ciudad de Buenos Aires el control de los subtes, las 33 líneas de colectivos, el Premetro y el tranvía de Puerto Madero, además de ratificar el acta de transferencia que fue firmada por el gobierno porteño y el nacional a principios de enero.
Sin embargo, Ritondo afirmó que "la Legislatura porteña es la única que puede aceptar una transferencia de servicios" y adelantó que mañana será debatido un proyecto de declaración que intima a "reanudar las negociaciones" con el Gobierno.
"Tenemos que respetar lo que dice la Constitución en el artículo 75, que los servicios deben venir con su correspondiente partida", sostuvo Ritondo en diálogo con Radio 10.
De esta manera, se espera que mañana la Legislatura porteña debata distintos proyectos de ley y declaraciones sobre el traspaso del servicio de subterráneos y el aumento de tarifa – que pasó de $1,10 a $2,50 – dispuesto por Mauricio Macri.
Por su parte, y pese a los dichos de Ritondo, el jefe de la bancada kirchnerista, Juan Cabandié, afirmó que la votación sobre el traspaso ya se realizó en el año 2000.
De todos modos, en el gobierno porteño consideran que el voto de la Legislatura será un antecedente fundamental llegado el caso de que opten por recurrir a la Corte Suprema de Justicia para que defina la situación.
Con 162 votos afirmativos, 54 negativos, 18 abstenciones y 22 ausentes, la iniciativa fue respaldada por todo el oficialismo y respaldada con disidencias por la Unión Cívica Radical. En tanto, el Frente Amplio Progresista se mostró dividido entre los legisladores que respaldaron un despacho de minoría y los que prefirieron votar en blanco.
Además del PRO, también rechazaron la iniciativa los diputados opositores del Frente Peronista, que incluye a Francisco de Narváez, el duhaldismo y aliados de Rodríguez Saá; la Unión Peronista de Felipe Solá y el monobloque de Patricia Bullrich, Unión Por Todos.