El presidente estuvo en la reinauguración de la planta de PSA-Peugeot, en El Palomar. El mandatario reconoció que hubo una transición que fue dura. Durante la recorrida, algunos trabajadores lo recibieron gritando "aguante Cristina".
El presidente Mauricio Macri participó de la reinauguración del Centro de Producción de PSA-Peugeot, en El Palomar. La inversión fue de 320 millones de dólares, que fueron a la reconversión de la planta, con la nueva plataforma CMP y la transformación industrial del Centro de Producción.
Allí afirmó que “la economía empieza a dar sus primeros pasos de crecimiento” después de varios años. Destacó que con la inversión es una demostración de confianza “a este camino que empezamos a recorrer en estos 15 meses” de gobierno. Y ello se debe a que “se produjo el cambio, de ser previsibles, confiables, ser parte del mundo global, de producir para venderle al mundo”.
El mandatario reconoció que hubo una transición que fue “dura, a mí me duele, hay mucha gente que pone el hombro”. Sin embargo, se justificó diciendo luego que las decisiones que tomó son para alcanzar “lo mejor para el futuro de los argentinos”.
Agregó que la visión del gobierno “no es crecer uno, dos, tres años y volver a caer. Estamos haciendo las cosas de fondo, sin atajos, sin mentiras, para crecer décadas, que es la única manera de rescatar la Argentina de la pobreza”. En ese camino se suscribió este miércoles el acuerdo con el sector automotriz, para producir un millón de autos en 2023 y crear 30 mil nuevos puestos de trabajo.
El presidente fue acompañado por los ministros de Producción, Francisco Cabrera; y de Trabajo, Jorge Triaca; y el intendente local, Diego Valenzuela. Participaron también el presidente mundial del Grupo PSA Peugeot, Carlos Tavares; el responsable de América Latina y miembro del Comité Ejecutivo, Carlos Gomes; y el titular de la empresa en la Argentina, Luis Ureta Sáenz Peña. Una de las perlitas fue cuando, durante la recorrida, algunos trabajadores lo recibieron gritando "aguante Cristina".