El gobierno libertario enfrenta un escenario crítico en el Congreso, donde la oposición avanza para anular el DNU sobre el canje de deuda impulsado por Caputo. Con tensiones al alza, el oficialismo busca evitar la sesión programada para este martes, mientras que la oposición asegura contar con los votos para derogar el decreto. En un contexto de creciente frialdad entre el Presidente y la Vicepresidenta, se agudizan las presiones sobre Villarruel y los gobernadores para impedir que el DNU caiga y, con él, la estrategia financiera del gobierno
Victoria Villarruel recibió un mensaje contundente de la gestión de Javier Milei: «Preferimos que el Congreso esté cerrado antes que caiga el DNU del canje de deuda». Esta instrucción responde al hecho de que, si el peronismo logra revocar ese decreto en el Senado, el presidente se vería forzado a enviar el presupuesto, que incluye una propuesta similar, pero con mayores exigencias de los gobernadores.
La postura de Milei es clara y refleja la inquietud del gobierno frente al avance de la oposición en la Cámara de Diputados con la propuesta para derogar el DNU 846/24, el cual faculta a Luis Toto Caputo a realizar un canje de deuda sin necesidad de cumplir con las mejoras en tasa, capital o plazo que establece la Ley de Administración Financiera.
La tensión en el Senado es palpable y la relación entre el Presidente y la Vicepresidenta parece haberse deteriorado irreversiblemente. La frialdad entre ambos es tan evidente que un senador libertario ha manifestado su desconfianza sobre las posibles decisiones de Villarruel ante los planes expuestos por José Mayans en la última reunión del interbloque peronista, donde expresó su intención de convocar una sesión este jueves con el fin de anular el decreto de Caputo.
Según informaron fuentes parlamentarias, el clima de nerviosismo es extremo. «Si Mayans logra reunir a 37 senadores, Villarruel no va a poder ‘hacerse la boluda’ y tendrá que abrir el recinto», comentaron.
Al cierre de esta nota, el temor en las oficinas de los aliados radicaba en la posibilidad de que Mayans y Juliana di Tullio consiguieran el respaldo de cuatro senadores radicales y lograran su objetivo. Ante esta situación, los senadores Juan Carlos Romero y Carlos «Camau» Espínola habrían aconsejado a Villarruel con una indicación tan firme como la de Milei: «No podés abrir de ninguna manera el recinto si existe el riesgo de que los peronistas consigan los votos necesarios y anulen el DNU del canje».
La falta de una respuesta tranquilizadora por parte de la Vicepresidenta ha incrementado la inquietud entre sus aliados. Ante esta situación, el gobierno intentó sin éxito presionar a los gobernadores para que instruyeran a sus diputados a ausentarse y así frustrar la sesión.
Fuentes del oficialismo reconocieron que confían en que Milei vete la reforma de la ley 26122, que regula la vigencia de los DNU, si es tratada en la Cámara Alta antes de que finalice el período de sesiones ordinarias. Sin embargo, la posibilidad de que el Congreso rechace el decreto solicitado por Caputo genera pánico en el gobierno. «Sin ese DNU, el gobierno estaría obligado a aprobar el presupuesto, lo que fortalecería la posición de los gobernadores y la oposición», comentaban este lunes en un despacho peronista.
Milei se ve obligado a buscar la aprobación de la ley de presupuesto, ya que en su articulado se incluyó el canje de deuda solicitado por Caputo mediante decreto. La inestabilidad en la estrategia política de los libertarios ha complicado este proceso. Esta maniobra fue denunciada por Mayans y Germán Martínez, junto con sus colegas en ambas cámaras, apenas dos días después de que el DNU fuera publicado en el Boletín Oficial.
Aun así, ni el macrismo ni Martín Menem confiaban este lunes en que lograrían frenar la media sanción. Los diputados del PRO llegaban a su reunión de bloque con la instrucción de la Mesa Ejecutiva del partido de no dar quórum, pero de votar en línea con La Libertad Avanza. En cuanto a Menem, había excusado la ausencia de las diputadas Rocío Bonacci, actualmente en Estados Unidos realizando estudios de formación política, y Marcela Pagano.
A pesar de los esfuerzos del gobierno por postergar la sesión programada para este martes, la oposición calcula que cuenta con suficientes legisladores para alcanzar el quórum, según se informó. Fuentes parlamentarias señalaron que los bloques de Miguel Pichetto, Facundo Manes y el sector peronista podrían imponerse tanto en la modificación de la vigencia de los DNU como en la anulación del decreto sobre el canje.