
La disputa se debe a la oferta del 15% de aumento salarial por parte del intendente Lanús, frente a la demanda del sindicato de un 50%.
El enfrentamiento entre el intendente de San Isidro, Ramón Lanús, y el Sindicato de Trabajadores Municipales del distrito sigue intensificándose. Este martes, el sindicato encabezado por Omar Arce declaró una huelga indefinida en el sector de cuidados comunitarios, lo que impactará la seguridad y el tránsito en el municipio.
“En una asamblea los trabajadores votaron tomar esta medida de paro por tiempo indeterminado, al día de hoy el conflicto sigue escalando, pero estamos totalmente abiertos al diálogo y continuar las negociaciones”, señaló el titular del sindicato Omar Arce. La disputa entre las fuerzas de seguridad y el intendente Lanús radica en una magra oferta del 15% de aumento, según se quejaron los empleados.
Desde entonces, el sindicato ha implementado diversas medidas de fuerza para hacer oír sus demandas. Inicialmente, llevaron a cabo asambleas y realizaron dos paros en los cementerios de San Isidro, pero no obtuvieron respuesta por parte del municipio. Las patrullas de Cuidado Comunitario, claves en la seguridad del distrito, comenzaron el paro por tiempo indeterminado.
El gremio sigue exigiendo el aumento inicial del 50% en dos cuotas, una en julio y otra en agosto. Sin embargo, desde el ejecutivo municipal persisten en ofrecer solo un 15%, lo que elevaría el salario básico de los empleados a un promedio de $240 mil.
«Fuimos citados por el Ministerio de Trabajo para una reunión de conciliación con el Ejecutivo. Es parte de todo el trabajo que hace el gremio presentando ante todas las instancias y esperamos tener una buena resolución, para acercar las partes» concluyo Arce
Manifestación en el Concejo Deliberante
Los trabajadores y trabajadoras dijeron presente este miércoles en la calle 25 de Mayo al 459, donde se ubica el Concejo Deliberante y justamente se estaba sesionando. Claudia Mariani, supervisora de servicios de rayo central, habló en primera persona del reclamo: “Los salarios son miserables y es calamitoso, yo como supervisora con 24 años de antiguedad cobro 600 mil, es una vergüenza, el reclamo es para el intendente, merecemos un salario digno”.
“Con el nuevo gobierno se agravó la decadencia en los salarios, en equipamiento, en los hospitales, no hay medicación tampoco hay médicos, esto es culpa del intendente”.
En un momento de la sesión, la concejala Celia Sarmiento del bloque UxP tuvo que pedir salir del recinto para charlar con los trabajadores que estaban recibiendo amenazas: “Los trabajadores están siendo víctimas de amenazas de personal que no se identifica, les dicen que en caso de no retirarse de la manifestación van a ser dados de baja de su trabajo”.
Desde el municipio señalan que la seguridad es un servicio esencial y que el sistema de Seguridad está funcionando, con los agentes de prevención de la Patrulla Municipal cumpliendo sus tareas en calle y con el Centro de Monitoreo operando.
En cuanto a la discusión salarial, recalcan que recibieron un municipio quebrado y que están ordenando las cuentas públicas.
Además, que ya actualizaron los montos de lo que se pagaba por «horas extra» y se ha cortado con las arbitrariedades (ya no se pagan a los mismos de siempre, sino a los que realmente trabajan tiempo extra).
También destacan que en lo que va del año ya se aumentó un 79% y se otorgaron dos bonos (uno de 50 mil pesos en enero; otro de 150 mil pesos en junio) y que para lo que resta del año, siguen las actualizaciones atendiendo al índice de inflación que viene a la baja.