Parece que el curtismo colocó huevos en varias canastas para compensar un resultado adverso y conservar la mayoría parlamentaria. Las principales fuerzas opositoras no logran hoy la unidad, y sería inminente la ruptura en el PRO local.
La dispersión tanto de Unión PRO como del Acuerdo Cívico y Social, que derivó en la presentación de varias listas comunales, en las elecciones del 28 de junio favorecerá al oficialista Frente Justicialista para la Victoria. Todos lo saben.
Quienes más lamentan esta situación son los dirigentes del ARI – Gen, quienes dicen tener un proyecto claramente opositor. De todos modos, en esferas que exceden los límites distritales, aún mantienen diálogo con el radicalismo, que pretende cortarse solo con Santiago Iuzzolino a la cabeza.
Casualmente, este comerciante de Caseros posee un vínculo estrecho con el curtismo; en una colectora divide votos, dentro del mismo espacio, después de las asunciones es difícil que comparta bloque con Elina Rossi y compañía.
En el francisquismo siguen las duras negociaciones. La incógnita es cuántas boletas quedarán de las tres que se presentaron. El edil Luis Martinelli – en las sesiones, cada vez más en sintonía con la mayoría - juega al enigmático y menciona que sigue en carrera junto a José Vallle; la dupla Horacio Alonso (felipista) y Jorge Balagur (PRO) es la que más la está remando y en este cambio de reglas, la experiencia no es garantía de nada.
Y Diego Achilli, dueño de una cadena de heladerías, va en sociedad (la más firme de las tres) con otro gastronómico, “el panadero” Ricardo Oronell, vocal del PRO, hoy señalado como un “traidor”. Inicialmente tenía el cuarto lugar en la nómina de Balagur, pero el sábado cambió de idea y cerró con el referente de D’ Onofrio.
El malestar va más allá en las filas macristas, ya que existen especulaciones con que detrás de esta decisión estaría la mano de Jorge Macri, que en Tres de Febrero es sinónimo de la concejal Soledad Martínez. Un ingrediente extra sería el beneplácito por esta maniobra de un pope del PJ que se divide entre la política y el fútbol.
En este contexto, y tras manifiestas diferencias en el último año, es casi un hecho la ruptura del bloque que también conforma Carlos Toniollo. Parecido a lo ocurrido en San Martín entre Pedro Buonsante y Ricardo Torres, aunque la gran diferencia es que en el municipio gobernado por Curto ambos legisladores entraron por el macrismo.