El líder de La Cámpora, el referente camionero y una foto cargada de mensajes hacia el ecosistema interno.
El diputado y líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, se reunió ayer en privado con Pablo Moyano en medio de las fracturas de la CGT y de la interna del Frente de Todos, por la relación con los gremios.
A cuatro meses de la unificación de la CGT, que tiene a Pablo Moyano como uno de los tres conductores, la central obrera ya parece fracturada y el referente camionero toma distancia de Héctor Daer y de la Casa Rosada.
Ver esta publicación en Instagram
Alberto recibió dos veces seguidas a Daer y Carlos Acuña, los otros dos integrantes del triunvirato cegetista, sin la presencia del hijo de Hugo Moyano. Toda una señal.
La semana pasada, el propio Moyano lanzó una dura advertencia contra la Rosada. «Si no se cumple la promesa de que no habrá ajuste, saldremos a la calle», dijo. Ayer Alberto se mostró con Moyano padre, Hugo, en el homenaje realizado a Saúl Ubaldini al cumplirse 40 años de la marcha Paz Pan y Trabajo que marcó el fin de la dictadura.
En ese contexto fue que en paralelo Máximo, visitó en la sede del gremio a Moyano hijo. La reunión, en la que hablaron de la situación del país, sirvió como un mensaje hacia dentro del FdT y de la interna sindical.
Es que se trata del segundo movimiento fuerte del hijo de Cristina Kirchner en el mundo sindical en cuestión de días. La semana pasada le quitó el control de la UOM a Antonio Caló luego de 20 años. Ese cambio histórico ya tuvo coletazos: el flamante secretario, Abel Furlán, se quedó con la presidencia del Concejo Deliberante de Zárate tras un acuerdo entre el kirchnerismo, el Frente Renovador y Juntos contra Osvaldo Cáffaro, aliado de Alberto.
El mensaje que interpretaron en el Gobierno con el batacazo de la UOM fue que Cristina busca romper el apoyo de Los Gordos del que se jactaba el presidente para hacer contrapeso dentro del Frente de Todos. Y es que el albertismo no nato, necesita músculo político en el que apoyarse en caso de querer romper o incluso tomar fuerza dentro de la propia dinámica interna.
La foto con Moyano, que está cerca de romper la unidad que se había logrado en la CGT, es una nueva muestra del estado de situación en el que se encuentra el peronismo y sus constelaciones.