El titular del Juzgado Federal de Quilmes ratificó la orden de desalojar las viviendas usurpadas en el bajo flores, hace ya ocho días. Por su parte, los ocupantes anunciaron que harán una huelga de hambre si no encuentra una “solución hoy”.
Por Antonela Galiani
La situación se vuelve cada día más tensa y las soluciones se dilatan. Este domingo el juez Federal de Quilmes, Luis Armella, ratificó la orden de desalojar de manera inmediata las viviendas ocupadas en el bajo Flores, que estaban destinadas a familias asentadas en la ribera del Riachuelo.
Pese a las sanciones que la justicia aplicaría a los funcionarios responsables si no cumplen la orden, los Gobierno de Ciudad y Nación no se ponen de acuerdo y continúan con las acusaciones cruzadas.
Mientras tanto, los ocupantes amenazaron con realizar una huelga de hambre si no reciben una “solución” favorable este mismo lunes. "Van ocho días, seguimos igual. Nosotros tenemos que seguir impidiendo que ingrese más gente, impidiendo que destrocen ese lugar, ya que las viviendas estaban listas para entregar", afirmó el ministro de Ambiente y Espacio Público porteño, Diego Santilli. Además, el funcionario se mostró preocupado ante el rumor de una nueva toma del Indoamericano.
Por el momento, se espera una reunión entre el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Guillermo Montenegro, su par bonaerense, Ricardo Casal, y un representante del Ministerio de Justicia de la Nación, encabezado por Julio Alak.
