Como consecuencia del choque, en el Canal Vinculación, a unos 200 metros de la intersección con el Río Luján, murieron Francisco Gotti, que viajaba en la lancha conducida por Torres Lacal; Bruzzone mientras era trasladada al centro de salud de la zona, y Manuel, cuyo cuerpo fue encontrado en el Río Luján cuatro días después.

El tribunal decidió que Pedro Torres Lacal sea detenido una vez que el fallo que de firme. Sin embargo, no podrá abandonar el país ni ausentarse de su domicilio por más de 24 horas
El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº 1 de San Isidro condenó a nueve años de prisión a Pablo Torres Lacal por la muerte del hijo de 14 años del dirigente radical Federico Storani, Manuel, la madre del menor, María de los Ángeles Bruzzone, y Francisco Gotti, un amigo del imputado, como consecuencia de un choque de lanchas en el Delta ocurrido en marzo de 2016.
La audiencia comenzó a las 13 en la sala grande de los tribunales, donde los jueces Alberto Ortolani, Sebastián Hipólito Urquijo y Gonzalo Aquino emitieron su veredicto en este proceso que comenzó el 2 de octubre. Tras sucesivos recursos de la defensa que impidieron el comienzo del juicio oral, Torres Lacal, de 55 años, fue condenado por «triple homicidio simple con dolo eventual».
“Se resuelve condenar a Pablo Gabriel Torres Lacal a la pena de nueve años de prisión, accesorias legales y costas del proceso, por encontrarlo autor penalmente responsable del delito de homicidio simple con dolo eventual, ordenando su detención, una vez que el fallo sea confirmado por el Tribunal de Casación de la Provincia de Buenos Aires”, dictaron los jueces Sebastián Urquijo, Alberto Ortolani y Gonzalo Aquino por unanimidad.

Los jueces dieron por comprobado que el imputado, al mando de su lancha Shark II, en la que viajaba junto a Gotti y Hernán Di Rico, manejó esa madrugada por el canal Vinculación con dirección al arroyo Pajarito -entre las 23 horas del 31 de marzo y las 12:15 del 1 de abril de 2016- a «gran velocidad y realizando movimientos ondulantes de tipo ‘zigzag’ hacia ambos márgenes -marcando una trayectoria incierta e imprevisible de la embarcación- en un lugar que -atento el horario y características geográficas- era casi nula la visibilidad».
El acusado quedará preso una vez que el fallo quede firme en Casación. No obstante, se ordenó que no podrá abandonar el país ni ausentarse de su domicilio por más de 24 horas sin autorización.
«Pablo Gabriel Torres Lacal era conocedor de todos y cada uno de los extremos fácticos que implicaban por su cantidad y calidad un peligro concreto, que finalmente se materializó en el resultado mortal, circunstancia que decididamente excede el ámbito de la imprudencia», determinó el fallo.
Además, minutos después de la condena, Fredy Storani, emocionado por la situación, expresó: «Llegué con una mezcla de angustia y expectativa. Pero este tribunal actuó rápido y bien. Peleamos mucho en el marco de las instituciones y el estado de derecho. Muchos casos como estos quedan impunes. Si bien es un alivio, nada me devuelve la vida de Manuel. Cambiaría todo esto por un abrazo».

Después, una de las tres hijas del dirigente radical, Constanza Storani, hermana mayor de Manuel, en diálogo con la prensa comentó: «Nosotros necesitábamos el dolo eventual no por una cuestión de venganza sino porque sabíamos que la conducta -de Torres Lacal- no había sido de descuido sino de un desprecio absoluto por la vida ajena. Sé que el pasado no se puede cambiar, y sé que yo no puedo evitar que Manu se haya subido a esa lancha, pero también sé que si no le hubiese pasado a él, le hubiera ocurrido a otra persona, porque el tipo este así iba».
Cuando a Storani le preguntaron si en las últimas semanas si Torres Lacal se había contactado con él, lo negó por completo y también confirmó que nunca se comunicó ni expresó sus condolencias desde que ocurrió el hecho.
En la audiencia de los alegatos, realizada el 9 de octubre, el fiscal Diego Callegari había pedido una pena de 12 años de prisión de cumplimiento efectivo y la querella 13 para Torres Lacal por el de Manuel Storani, su madre y Francisco Javier Gotti, quien viajaba en la lancha conducida por el acusado.
La tragedia que ocurrió en el Delta
El 31 de marzo de 2016, Manuel Storani, de 14 años, viajaba junto a su mamá, María de los Ángeles Bruzzone, y otras cuatro personas en una lancha que durante la madrugada de ese día fue violentamente embestida por otra embarcación conducida por Pablo Torres Lacal, “que venía a velocidad máxima y haciendo zigzag”, según testimonios de los testigos.
Las víctimas volvían de festejar un cumpleaños en un restaurante en el polo gastronómico del arroyo Pajarito. La Mad II se partió por la mitad y sus seis ocupantes terminaron en las aguas del canal Vinculación. Lograron ser rescatados por personas que viajaban en otra embarcación.