Concejales de San Isidro expresan su preocupación por el desequilibrio ambiental que pueden provocar las obras de infraestructura e inmobiliarias que se planean desarrollar en el Delta del Tigre. Consenso absoluto entre todos los sectores políticos del distrito.
En la pasada sesión del Concejo Deliberante de San Isidro, se ingresó un proyecto de resolución donde se solicita al Departamento Ejecutivo que tome medidas sobre el impacto ambiental que puede producir un gran proyecto inmobiliario a desarrollarse en el Tigre.
La propuesta nació del bloque de Unión PRO a través de la edil Ester Fandiño. Lo llamativo es que tuvo gran aceptación en todos los espacios políticos, fundamentalmente en el oficialismo de Posse.
El texto refiere a las “obras de infraestructura y asentamiento inmobiliario que están desarrollándose en la 1ª Sección Isla del Delta”, y a la “suspensión de las mismas por sentencia judicial ante recurso de amparo presentado”.
Entre los argumentos del proyecto se habla de “la obligación de proveer a la preservación del Patrimonio Natural”, del “articulo 41 de la Constitución Nacional sobre la preservación y no contaminación del ecosistema”. Además, el texto cita otras legislaciones nacionales y provinciales relacionadas al tema.
La preocupación aparece por la posibilidad de “un cambio en los niveles de crecientes y caudales pueden poner en riesgo el actual sistema de protección de los barrios, e infraestructura ribereña”. También se pone en riesgo la diversidad biológica de la zona, los humedales y el medio ambiente.
El concejal oficialista Carlos Castellano afirmó a La Noticia Web que este proyecto en Tigre “son desarrollos urbanos, en algunos casos de magnitudes importantes. Eso a veces obliga que haya rellenos de esos islotes. Va a generar seguramente algunos niveles de impacto, producto de las nuevas urbanizaciones respecto de los residuos que se tengan que emanar. Nos preocupa porque San Isidro forma parte de este Delta, aunque sea en su desembocadura. Hay una ley donde los cuatro municipios que componemos la Región Metropolitana Norte, generamos un nuevo límite de isla. Por lo cual toda nueva isla que se forme frente a las costas de San Isdro y de Vicente López va a corresponder a esto municipios”.
“Esto va a significar una sedimentación distinta, un afluente de agua distinto, un nivel de contaminación que si no es correctamente previsto, puede llegar a afectar también las costas de municipios cercanos. Con lo cual nos parece que nos tienen que dar participación. Nos tienen que informar, nos tienen que permitir que evaluemos cuales son los emprendimientos que se van a hacer, ya que el delta sin duda es un espacio ecológico que debería haber sido tomado como un área ecológica protegida por la provincia de Buenos Aires y que no sabemos por qué intereses nunca se ha hecho. Si no existe un plan que regule la urbanización de todo lo que es el Delta y el río Paraná, seguramente va a generar efectos o consecuencias no deseadas en materia ambiental”, agregó Castellano.
Por lo tanto, el Proyecto de Resolución requiere en su articulo 1, un Estudio de Impacto Ambiental, de acuerdo a lo establecido por la Ley 11723, para determinar la incidencia y perjuicios que este tipo de emprendimientos pueda generar en la Región y en la desembocadura del Delta a las aguas del Río de la Plata, como asimismo la necesidad de establecer un plan rector para el desarrollo urbano del Delta que impida daños y efectos no deseados al ecosistema natural del mismo.
El artículo 2º solicita a las autoridades Provinciales competentes que informe y consulte a las diferentes Jurisdicciones de la Región Metropolitana Norte, sobre las obras de este Proyecto Urbanístico y todos aquellos que puedan ser motivo de modificaciones que impliquen efectos al caudal y/o nivel de las aguas que desembocan, sedimentación de los lechos, y/o cualquier otra consecuencia positiva o negativa sobre una zona que es un recurso natural compartido dentro del ecosistema Delta – Río de la Plata, con impacto ambiental sobre todas las costas de los municipios ribereños cercanos.-
El punto 3 pide al Departamento Ejecutivo que informe si obran en su poder actuaciones respecto del emprendimiento inmobiliario, que se está desarrollando en la 1ª Sección Islas del Delta, sobre el Canal Vinculación, Río Luján y Arroyo Pacú, caso contrario instar las actuaciones pertinentes que permitan evaluar los proyectos que se estén gestionando en toda la zona del Delta del Paraná dentro de los ámbitos territoriales de la Región Metropolitana Norte.-
Finalmente, el último punto solicita al Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible emita opinión respecto del desarrollo urbanístico que se viene proyectando sobre el Delta del Paraná, Primera Sección de Islas, y acompañe estudios, proyectos y/o informes que puedan servir para la evaluación de la sustentabilidad de todos los desarrollos que pretendan realizarse en el sector.