José Scioli apuesta a que terminen las diferencias entre el francisquismo y el PRO. También, en declaraciones periodísticas hizo referencia a las internas peronistas, y a la figura de Massa. Respecto al gobernador bonaerense deslizó, “no veo pelea entre Daniel y Mariotto, es una nueva etapa"; y opinó de la foto de su hermano con el jefe de Gobierno, “algunos quieren dramatizar o generar problemas”.
Cada año, José “Pepe” Scioli vuelve a veranear al mismo lugar. El hermano del gobernador bonaerense eligió celebrar Año Nuevo en Punta del Este junto a la familia de Laura, su mujer uruguaya, y sus tres hijos.
Desde las playas esteñas, “Pepe” busca terminar con las diferencias entre el ex candidato a gobernador bonaerense, Francisco De Narváez y el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. “El futuro de Francisco y Mauricio es estar juntos. Ni Macri puede pensar en ser presidente sin un candidato a gobernador fuerte, ni un candidato a gobernador puede pretender serlo sin un candidato a presidente fuerte por la nueva ley electoral”.
Sin demasiados ánimos revisionistas, prefirió hablar de lo que se vendrá. “No me parece bueno que la interna del peronismo se resuelva en las elecciones nacionales. No es bueno ni para el justicialismo ni para el país. Creo que lo mejor para el sistema democrático es que cada partido tenga sus internas y se fortalezca en esas internas”.
Y dijo: “Francisco es peronista. No dudo de que si se da un proceso lógico de internas dentro del Partido Justicialista va a participar. El PRO es un partido que viene creciendo elección tras elección, pero por ahora su lugar fuerte está en la Ciudad de Buenos Aires. Veremos si tiene la capacidad de un armado nacional. Tiene buenos cuadros políticos y un desafío enorme por delante”.
Consultado por la proyección bonaerense de Sergio Massa, sólo indico que “el escenario en la Argentina es muy cambiante, pero sin dudas serán quienes lleguen con mayores posibilidades a 2015, aunque antes está 2013”.
Además, habló de Daniel Scioli y su relación con Mariotto. “La verdad es que no veo peleas, son parte del ensamble de la nueva etapa del Gobierno. Ingresaron nuevos cuadros políticos y son lógicos los reacomodamientos. Y sobre la polémica foto entre el mandatario bonaerense y Mauricio Macri consideró que “algunos quieren dramatizar o generar problemas donde no los hay. No es bueno para la Presidenta ni para la gente una provincia con conflictos. No es cuestión de oportuno o no. Las democracias modernas se construyen así, conviviendo en paz, dialogando y en armonía más allá de las diferencias. Lo que tenemos que discutir oficialismo y oposición son los desafíos que tiene la Argentina por delante. Un país que suspende las importaciones, suspende el crecimiento. Vienen tiempos difíciles y debemos profundizar las coincidencias y superar las diferencias”.
Fuente: Perfil