El hasta hoy intendente de Tigre juró como jefe de ministros en un colmado Salón Blanco de la Casa de Gobierno. Alberto Fernández estuvo en la ceremonia, se mostró sonriente y lo saludó con un efusivo abrazo. Luego, Massa y el ministro de Planificación presentaron el proyecto que enviarán al Congreso sobre la reestatización de Aerolíneas Argentinas.
En un Salón Blanco desbordado, el kirchnerismo dejó atrás formalmente la etapa de Alberto Fernández en la Jefatura de Gabinete. El hasta hoy intendente de Tigre, Sergio Massa, juró como jefe de ministros ante la presidenta Cristina Kirchner. Y su primera actividad en el cargo fue una conferencia para presentar el proyecto que se enviará al Congreso sobre la reestatización de Aerolíneas Argentinas. A su lado, en esa actividad, estuvo el ministro de Planificación, Julio de Vido.
Las primeras palabras en el cargo insistieron con algo que venía repitiendo desde ayer, cuando se conoció el recambio: "Para mí es un gran orgullo, una gran satisfacción y una gran responsabilidad". También hizo mención a la frase que Cristina Kirchner le deslizó con tono jocoso mientars esperaban el momento de la jura: "Tenés 30 segundos para arrepentirte".
A los 36 años, Massa asumió en una ceremonia en la que se mostró siempre sonriente y repartió abrazos a diestra y siniestra. Pero hubo uno más largo que lo usual: con su antecesor en el cargo. Durante ese saludo, que terminó con Fernández dando una palmada en el pecho de Massa, los aplausos sostenidos desde el "Sí, juro", subieron el tono.
"Alberto es un hombre de bien y un gran dirigente político y sé que en los primeros días va a estar ayudándome", dijo Massa. El saliente jefe de Gabinete le devolvió gentilezas y aseguró que había ido para dar "un fuerte apoyo" al Gobierno. "Es mi obligación", enfatizó cuando fue abordado por los periodistas.
Durante la jura, a un costado del escenario en el que Massa asumió como jefe de gabinete, pudo verse a su esposa, Malena Galmarini, abrazada con su padre Fernando "El Pato" Galmarini, ex secretario de Deportes durante el menemismo.
Antes de la ceremonia, durante toda la jornada, hubo una m ezcla de buenos augurios, expresiones de deseo y elogios en el kirchnerismo –e incluso desde otros sectores- acompañando la designación de alguien con perfil "dialoguista". Las entidades del campo lo recibieron palabras de apoyo y también el titular de la CGT ponderó sus habilidades.
Luego, Massa se sentó a la misma mesa con De Vido, el secretario de Transporte, Ricardo Jaime y el nuevo gerente general de Aerolíneas Argentinas, Julio Alak, para anunciar el envío al Congreso del proyecto del Gobierno sobre la reestatización de Aerolíneas Argentinas.
Según Massa, al enviar al Parlamento el acta acuerdo para "garantizar" el funcionamiento de Aerolíneas se buscó dar un gesto de "fuerte transparencia" y de "participación" en el proceso por parte del Poder Legislativo.
La foto que dejó ese anuncio es la que genera algunos interrogantes para los primeros pasos de Massa en la Jefatura de Gabinete, sobre todo cómo será su relación con el ala santacruceña del Gobierno, que tiene a de Vido como cabeza más visible. Alberto Fernández fue durante su gestión un contrapunto y equilibrio de los pingüinos y, aunque Massa llega con mucha mejor relación, habrá que ver cómo se definen los espacios .
La agenda del flamante jefe de Gabinete había arrancado hoy temprano, en el Concejo Deliberante de Tigre, donde pidió la licencia al cargo de intendente de ese municipio que ocupaba hasta hoy. Massa será reemplazado en la intendencia por Julio Zamora