
El gran crecimiento de la industria eólica favorece a la producción de energías renovables con la ayuda de una gran presencia industrial y un potencial exportador.
La instalación de parques eólicos en el país favoreció no solamente el ahorro de 800 millones de pesos por sustitución al gas, sino que su fabricación de energías renovables refleja un gran impacto en el cuidado ambiental.
Alrededor de 88 millones de metros cúbicos de gas diario es lo que se logró reemplazar, lo que termina generando una considerable reducción de emisión de gases de efecto invernadero. La Argentina pasó de prácticamente no poseer participación en la matriz enérgica a aportar en un 10% en dicho sector.
Desde el Gobierno se buscan implementar tres diferentes estrategias en éste rubro de energías renovables. Por un lado, fomentar la inversión de proyectos que sustituyen importaciones, una coordinación general con organismos multilaterales para obtener financiamiento y un canje de la deuda que termine de facilitar al cambio climático.
La implementación de los molinos generadores de energías renovables, favoreció a la reducción en grandes niveles porcentuales de energía consumida en años anteriores, pasando de 180 a 60 M/Wh consumidos. Se estima que un 18% es lo que se logró reducir en gases de efecto invernadero por GWh generados en lo que va del año.
Con el compromiso al que Argentina se comprometió para aportar las metas establecidas en el Acuerdo de París, se calcula que se hará una inversión de entre $9500 millones a $19.000 millones para seguir impulsando la producción de energías renovables. Mientras que, en cuanto a energía destinada a contribuir Argentina deberá producir entre 750 a 1500 MWh anuales hasta 2050.