“La incorporación de los pibes a la política es lo mejor que hemos hecho porque no somos eternos. No somos eternos y nos ha tocado comprobarlo dramáticamente, que la vida se extingue cuando menos lo pensamos. Los verdaderos custodios del legado no somos los que estamos en el escenario, que estamos viejos, sino son todos ustedes, que no van a permitir jamás dar un paso atrás en todo esto que hemos logrado”, indicó la mandataria.
Con esas palabras cerró un discurso de 39 minutos en un estadio de Vélez que lució colmado de militantes, funcionarios, dirigentes sociales y gobernadores afines al Gobierno.
A 9 años de las elecciones presidenciales de 2003, la jefa de Estado recorrió las principales políticas de la era kirchnerista e insistió en varias oportunidades con la idea "no somos eternos", quizás con una mirada hacia el 2015.
"Las nuevas generaciones son las que tienen que tomar la posta y la bandera para seguir con los ideales de 200 años de historia, para que nuestras Islas Malvinas vuelvan a formar parte de nuestras instituciones, porque ya son parte para siempre de nuestra geografía y nuestra historia", resaltó.
Y continuó: "Son ustedes los que deben seguir haciendo historia y deben hacerlo bajo el lema por el cual fue conficado el acto; unidos y organizados para profundizar la transformación".
La mandataria, que llegó acompañada a Liniers de su hijo Máximo, aprovechó para agradecerles a los partidos de la oposición el respaldo a la expropiación de YPF en el Senado y convocó a la "unidad".
Además criticó a quienes "elaboraron teorías sobre qué significaba la sintonía fina". "Decían que íbamos a retroceder, que íbamos a cambiar... ¡Qué poco me conocen y que poco conocen al pueblo argentino! Estas ideas y estas conquistas no pertenecen a una presidente ni a una fuerza política , son hoy parte de toda la República Argentina", insistió.
Un acto multitudinario
Sobre el escenario acompañaron a Cristina Kirchner el vicepresidente Amado Boudou; el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina; los ministros Florencio Randazzo, Carlos Tomada y Alicia Kirchner; el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez; el senador Daniel Filmus; el ex canciller Jorge Taiana; el dirigente piquetero Emilio Pérsico; el ex canciller Jorge Taiana, el líder de la CTA oficialista,Hugo Yasky; y el diputado Edgardo Depetri, entre otros.
También estuvieron cerca del estrado los gobernadores José Luis Gioja, Sergio Uribarri y Daniel Scioli; el canciller Héctor Timerman; el vicegobernador bonaerense,Gabriel Mariotto; el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno; el jefe de la bancada kirchnerista en Diputados, Agustín Rossi; la presidente provisional del Senado, Beatriz Rojkés de Alperovich; el diputado y dirigente de La Cámpora,Andrés "Cuervo" Larroque, y la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini.
Cerca de las 16, gran parte del Gabinete nacional ya se encontraba dentro del estadio. La ministra de Desarrollo Social y hermana del ex presidente, Alicia Kirchner, aseguró que “es un día muy especial” ya que se celebran 9 años desde que se comenzó a “darle un giro a la historia”.
“Quiero agradecerle a todos los militantes y al pueblo argentino, que nos está acompañando. Néstor vive en el pueblo y ha marcado un camino que nos va a permitir abrir otros caminos a todos nosotros”, declaró.
El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, resaltó al llegar al estadio que la convocatoria es “una fiesta”. “Es un encuentro de todo el país y una emoción muy grande para todos aquellos que acompañan y adhieren a este proyecto político”, destacó.
Consultado por la ausencia de Hugo Moyano, el funcionario evitó entrar en polémicas y aseguró: “Yo creo que el movimiento obrero organizado va a estar presente como siempre lo han estado desde que este proyecto político llegó al Gobierno”.