Los jugadores ya se fueron a dormir en sus habitaciones del Hotel Four Seasons. El objetivo prioritario del grupo pasa por adaptarse al cambio horario, a las comidas y también al frío de esta imponente Tokio.
El plantel de Boca tiene, por estas horas, un desafío que no pasa exclusivamente por lo futbolístico. Cómo conciliar el sueño, es la cuestión. Las 13 horas de diferencia con Tokio, son una complicación extra para los argentinos que, lentamente, nos vamos instalando en esta imponente ciudad, tan cara como deslumbrante.
Ni hablar para los futbolistas, que partieron el miércoles último a las tres de la tarde y, tras una escala en París, arribaron en el vuelo 276 de Air France. Cerca de las 13, hora local, llegaron a un lugar en el que por ahora parece respirar fútbol a cuentagotas. Un dato, al menos: en las inmediaciones del Hotel Four Seasons no se ven camisetas azul y amarillo. Tampoco hinchas a quienes los delate su pasión futbolera.
Los jugadores tratan de acostumbrarse, lógicamente. A la hora, a las comidas y también al frío. Sí, porque aquí la temperatura es baja en serio. No llega a los ocho grados y se siente la diferencia con Buenos Aires. Recomiendan, por lo pronto, abrigarse para evitar un resfrío inoportuno.
Russo, antes de ir a la cama, salió a estirar las piernas y una de sus preocupaciones era: "¿Podré dormir?" No hubo respuesta entre sus interlocutores, más intrigados que el propio técnico.
El grupo fue recibido en el aeropuerto internacional de Narita, cercano a la capital nipona, por medio centenar de hinchas locales y fuertes medidas de seguridad. Luego del almuerzo y del descanso los jugadores realizaron trabajos físicos en el gimnasio del Hotel. Todo muy livianito, como para ir entrando en ritmo.
La Copa Mundial de Clubes se jugará en las ciudades japonesas de Tokio, Toyota y Yokohama. Participarán los siguientes clubes: Boca (Argentina, por Conmebol), Milan (Italia, por la UEFA), Pachuca (México, por la Concacaf), Etoile Sportive du Sahel (Túnez, por Africa), Waitakere United (Nueva Zelanda, por Oceanía), Sepahan (Irán, por Asia) y Urawa Red Diamonds (Japón, invitado al torneo y campeón asiático).
El debut será el 12 de diciembre en Tokio, ante el ganador del partido entre el Pachuca y el Etoile Sportive du Sahel.