Los peronistas están perdiendo la brújula. Aunque sigue firme la conducción de Hugo Curto, hay dispersión en su tropa. Horacio Alonso no cesa en su trabajo para 2011 y ahora anda de peña. Y en el Concejo Deliberante, Patricia Yedro sufre de incontinencia verbal.
EL AVANCE DE ALONSO
Horacio Alonso continúa adelante con su táctica de seducción del jefe político del PJ de Tres de Febrero, el intendente Hugo Curto. Y para disgusto de más de un funcionario del municipio, cada vez que el ex edil organiza un acto moviliza cientos de militantes.
La última movida fue la creación de la peña Roberto Heredia (nombre que apela a las emociones de los históricos), que realizará encuentros itinerantes. El puntapié fue en la Sociedad de Fomento de Caseros y los panelistas fueron el metalúrgico y presidente honorario y Mario “Pacho” O’Donnell, quienes debatieron sobre la identidad nacional.
En el público, entre otros, estuvieron el secretario General, Miguel Ríos, y el director de Cultura, Roberto Surra.
Corren versiones que se sumarían en los próximos días al espacio algunos concejales, uno de ellos considerado un incondicional del presidente del Cuerpo.
En un contexto de especulaciones constantes en torno al oficialismo, Alonso avanza en la consolidación de su figura. Planifica para noviembre la visita del ministro bonaerense Oscar Cuartango o el apoderado del PJ, Jorge Landau, que hablaría de la intrincada reforma política.
DISCÍPULA DE ISHII
Los chispazos en el bloque oficialista, presidido por Jorge Urrutia, además de no aminorar ya resultan poco disimulables. Reunir a todos los integrantes es casi una misión imposible y cuando coinciden hay dardos cruzados para todos los gustos.
El problema es que esas coincidencias por lo general son con muchos testigos, en el recinto. En la última sesión, Patricia Yedro, que si hace falta hasta muestra su ropa interior y cuando habla no tiene “filtro”, en plan enigmático arremetió contra un traidor, a quien atribuyó usar polleritas de noche. Se sospecha que es alguien que rumbea por barrios de monobloks.
Más tarde, cuando los concejales debatían en torno a métodos anticonceptivos, no fueron pocos los curtistas que chicanearon a Miguel Gómez - ¿rompió una cámara de seguridad? -, diciendo que los odontólogos no pueden recetar las denominadas pastillas “del día después”.