La inauguración de obras de urbanización reunió a la Presidenta, los diputados nacionales, el gobernador Scioli y el intendente Lucas Ghi. La mandataria elogió la administración local, que cuenta con el aval del populoso barrio, y agradeció el acompañamiento de Sabbatella desde el Congreso. El jefe comunal indicó que “este proceso constituye una revancha de la actividad política”. Foto de una alianza que se afianza. Y primer encuentro del ex presidente con Scioli desde el acto de La Boca
Por Elisa Rossi
Si bien el marco elegido fue el institucional, con la inauguración formal de 438 viviendas del Barrio Carlos Gardel de El Palomar, y quienes hicieron uso de la palabra fueron la presidenta Cristina Fernández y el intendente Lucas Ghi, existieron dos personalidades que midieron fuerzas, ambos legisladores nacionales y ex cabezas de Departamentos Ejecutivos: Néstor Kirchner y Martín Sabbatella.
El acto se efectuó en el corazón del barrio y contó con una organización aceitada que incluyó videos institucionales y la actuación de la orquesta infanto-juvenil de la zona. También formaron parte del panel el gobernador de la Provincia, Daniel Scioli, el ministro de Educación Alberto Sileoni – hubo entrega de netbooks a estudiantes secundarios - y el secretario de Obras Públicas José López.
Mientras que el santacruceño teje estrategias con proyección electoral y reta en público al gobernador bonaerense, que desempeñó nuevamente un rol deslucido al lado del matrimonio Kirchner y pasó por Morón sin decir palabra, el jefe del PJ no dudó en sumarse a la comitiva que arribó a territorio progresista. Distrito que lleva hace diez años el sello de Sabbatella, dirigente que durante todo el acto conversó de forma animada con Kirchner. Alrededor del moronense giran varias hipótesis: que podría ser el candidato a vicepresidente que secunde a un Kirchner o que se postularía como gobernador, tijeritas a mano en resistencia a la maquinaria justicialista.
No fue la primera vez que los funcionarios nacionales bajaron al municipio del oeste del conurbano, sin contar que esta obra engrosa una generosa lista de emprendimientos financiados por Nación. Tampoco fue la primera vez que abundaron los discursos que aunque marcaban diferencias partidarias, al mismo tiempo señalaban la buena sintonía entre ambas administraciones. Y seguramente no será la última.
PRUEBA SUPERADA
Como ocurrió en Altos de Podestá, antes de subir al escenario la comitiva visitó una de las casas (perteneciente a la primera etapa); asimismo pasó por el flamante centro de salud Malvinas Argentinas. En la calle la gente esperaba rodeada de un celoso operativo de seguridad, y con banderitas en mano.
La urbanización de Carlos Gardel – enmarcada en el Plan Federal implementado en 2005 - incluye un total de 482 viviendas en terrenos individuales, servicios completos, apertura de calles, alumbrado público, parquización, un nuevo jardín de infantes municipal (que funciona desde el año pasado), un centro comunitario para distintas actividades sociales y el centro de atención primaria de la salud.
En su discurso, interrumpido varias veces por la efusividad de la gente, Cristina Fernández destacó que es cuando se está “en la Argentina profunda, que estaba sumergida y olvidada” el momento en el cual “uno se siente verdaderamente presidenta de todos los argentinos”.
Dedicó un comentario a la entrega de computadoras: “Tendrían que tener la posibilidad que las compren los padres, quiero vivir en ese país, todavía nos falta pero por eso tiene que estar presente el Estado para saldar esa brecha de inequidad. Tenemos que seguir profundizando este proceso”.
Además, hizo referencia a las obras y políticas sociales que se están llevando a cabo, entre ellas los aumentos a jubilados y la asignación universal por hijo, y destacó que “nada de esto hubiera sido posible si no hubiésemos recuperado los recursos de los trabajadores que estaban en manos de las AFJP”, y fue en ese punto en el cual se dirigió a uno de los anfitriones, “aquí en Morón, quiero agradecer a la fuerza política del hoy diputado Martín Sabbatella que fue uno de los pocos que nos acompañó en esta medida transformadora y revolucionaria. Nobleza obliga, y como señalamos a los que se oponen a todo, los que quieren desfinanciar el Estado, quiero rescatar a aquellos que aún sin pertenecer a este colectivo político que gobierna la Argentina, apoya sus políticas de Estado, apoya lo que es un beneficio no para un gobierno, sino esencialmente para todos los argentinos”.
Sobre el cierre de su alocución mencionó que “la soberanía no reside en el Parlamento”, y disparó, “pese a los palos en la rueda, a las operaciones que sufre el gobierno, vamos por más justicia, educación, salud, vivienda. Convoco a todos a no bajar los brazos, yo no los voy a bajar”.
GHI: “AQUÍ, RELEGITIMAMOS A LA POLÍTICA”
El intendente no ocultó su beneplácito. “Quiero destacar el enorme contenido simbólico que tiene este acto, es la primera vez que un presidente asiste a nuestro barrio Carlos Gardel. Como también fue la primera vez hace pocos meses cuando la Presidenta estuvo en el Posadas en el anuncio de la puesta en marcha de la obra que transformará uno de los principales hospitales que tenemos en Buenos Aires”.
A su vez, Ghi destacó los niveles de inversión pública y la “capacidad de articulación, aún con identidades políticas distintas”. E hizo alusión a que las obras se iniciaron con las gestiones de Kirchner y Sabbatella. Asimismo comentó que “cuando el año pasado, en el marco de la crisis financiera internacional arreciaban las voces que le sugerían adoptar medidas fiscalistas, de corte neoliberal, de enfriamiento de la economía, nosotros temimos por esta obra, y afortunadamente fue su coraje y su determinación la que hizo que hoy la estemos inaugurando”.
Concluyó: “Este proceso constituye una revancha de la actividad política, porque aquí la política había mostrado su rostro más siniestro, el de la mentira, la especulación, la demagogia, del clientelismo; y hoy, con la participación, el entusiasmo que vemos aquí, relegitimamos a la política como la herramienta más potente que tienen los pueblos para transformar su destino”.