Lo hizo "en nombre del pueblo argentino" al inicio de la “marcha blanca”. Marchó junto a abuelas de Plaza de Mayo y Carla Bruni. Mañana se reunirá con el francés Nicolas Sarkozy por el tren bala y la deuda con el Club de París.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner exigió la liberación de la rehén colombo-francesa de las FARC, Ingrid Betancourt, "en nombre del pueblo argentino" durante la "marcha blanca" por las calles de París.
La mandataria pidió eliminar "todos los obstáculos" que la están impidiendo. "Quien más esfuerzo debe hacer para la liberación de estos obstáculos son precisamente quienes tienen la responsabilidad de conducir las instituciones de la democracia y facilitar el canje humanitario", afirmó.
“Los derechos humanos deben prevalecer sobre toda otra cuestión", agregó.
La jefa de Estado argentina pronunció estas palabras acompañada por la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, y la de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Marta Vásquez.
Cristina Fernández llegó a París para mantener un encuentro con su colega francés, Nicolas Sarkozy, centrado en las relaciones bilaterales y en los rehenes de las FARC en Colombia. Además, buscará aceitar los vínculos con el país de origen de las empresas que financiarán el proyecto más ambicioso de su gobierno: el tren bala. Y dialogarán sobre las relaciones bilaterales, el vínculo de la Argentina con la Unión Europea y el Club de París, con quien el país mantiene una deuda de más de 6.000 millones de dólares.
Arropados por políticos y personalidades del mundo de la cultura y el deporte, varios familiares de Betancourt liderarán la "marcha blanca" de París para llamar a la liberación de la rehén que, en palabras de Sarkozy, está "en peligro de muerte inminente" por los problemas de salud que padece.