Horacio Rodríguez Larreta y Aníbal Fernández informaron los detalles del nuevo plan. Alertaron que quienes usurpen un predio serán excluidos de este y de cualquier otro subsidio social. Se exigirá residencia de dos años en la Ciudad para la admisión. "Por cada peso que ponga el gobierno porteño, el Estado pondrá otro", indicó el jefe de Ministros tras anunciar el acuerdo.
El Gobierno nacional y la Ciudad de Buenos Aires llegaron a un acuerdo para financiar en forma conjunta un plan de viviendas sociales. De este modo, buscan solucionar el conflicto habitacional en la Capital Federal y bajar las tensiones generadas en el sur por las ocupaciones ilegales.
Horacio Rodríguez Larreta fue el vocero del Gobierno porteño encargado de oficializar el acuerdo, que incluirá "la urbanización de villas de emergencia". "Esto es garantizar la presencia del Estado, darles infraestructura y asistencia", contó el ministro porteño.
Las familias que pretendan acceder al plan de viviendas sociales deberán acreditar una residencia mínima de dos años en la Ciudad de Buenos Aires y quienes participen de ahora en más en una toma ilegal serán directamente excluidos del plan.
"Vamos a priorizar a los que más necesiten. Los okupas del Parque Indoamericano formarán parte del plan, pero no serán beneficiados en comparación con otras familias que estén en un estado de mayor necesidad", contó Rodríguez Larreta.
En tanto, Fernández señaló que "la ciudad presentará su plan de viviendas al Estado nacional con sus particularidades y requisitos, y hablamos de financiamiento conjunto y por cada peso que ponga la Ciudad, el Estado pondrá un peso".
"Todo aquel que usurpe no tendrá derecho a formar parte de un plan de vivienda ni de ningún plan social de ninguna característica. Esto es una decisión para todo del país, ya que son acciones que son cuestionadas y criticadas por nosotros", agregó el jefe de Gabinete.
Además de Rodríguez Larreta y Fernández, participaron del encuentro el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, el ministro del Interior, Florencio Randazzo y los funcionarios porteños Guillermo Montenegro y María Eugenia Vidal.