El intendente de Tigre, de 36 años, se reunió hasta hace instantes con la presidenta Cristina Kirchner en Olivos. "Me enorgulleció esta oferta", dijo en un breve contacto con la prensa al salir. Mañana asumirá su cargo en Casa de Gobierno.
Tras un reguero de versiones más corto que en otras oportunidades, pero no menos intenso, se supo este mediodía que el ex titular de la ANSeS e intendente de Tigre, Sergio Massa, será el nuevo jefe de Gabinete.
Lo confirmó la agencia de noticias estatal Télam, tras una mañana en la que también se habían escuchado los nombres del ministro del Interior, Florencio Randazzo, el embajador en España, Carlos Bettini, y el secretario legal y técnico, Carlos Zannini.
El ex titular de la ANsES estuvo reunido hasta hace minutos en Olivos con la presidenta Cristina Kirchner. Al salir, en declaraciones a radio 10, reconoció que le habían ofrecido el cargo y lanzó: "Me gustaría que en todo caso sea la Presidenta la que informe, pero efectivamente, me enorgulleció esa oferta".
El flamante jefe de Gabinete tiene 36 años y asumirá mañana su cargo en la Casa de Gobierno.
Su nombre había sonado como ministeriable incluso desde antes del traspaso de poder de Néstor Kirchner a Cristina, en diciembre del año pasado. Además de una labor elogiada por propios y ajenos en la Administración Nacional de la Seguridad Social, pesaba el vínculo cercano que había logrado construir con el santacruceño.
Esa relación se fue forjando con el tiempo a pesar de que Massa había desembarcado en la ANSeS durante la presidencia de Eduardo Duhalde.
Kirchner lo mantuvo en su cargo y le dio la responsabilidad de ir por la intendencia de Tigre, un cargo que al justicialismo le resultaba esquivo desde 1987. Massa cumplió, se quedó con la jefatura comunal por holgado margen y escaló aún más en la apreciación del matrimonio Kirchner.
Massa posee un perfil dialoguista, con buena llegada a los sectores medios, algo que el matrimonio Kirchner necesita con creces en este momento de la coyuntura política, para recuperar el terreno perdido.