Manuela Schuppisser es concejala de Unión Por La Patria en San Isidro y, además, es nieta de un desaparecido durante la última Dictadura Cívico Militar.

En su último discurso en el Concejo Deliberante, Schuppisser habló de un proyecto que presentaron con respecto a mantener viva la Memoria en San Isidro: «Lo pensamos en línea con la Ley Nacional 25633, que declaró el 24 de Marzo como Día de la Memoria, la Verdad y la Justicia. En nuestro municipio tenemos al rededor de 320 desaparecidos, entre los cuales había mujeres, hombres y niños, algunos comprometidos políticamente y otros no. Muchas veces se habla de bandos y guerras, y me parece necesario reflexionar que fue un genocidio, un exterminio de personas. También el exterminio de la economía, el exterminio del Estado de Derecho. No por nada se apuntó a los pibes y las pibas del Colegio Nacional de San Isidro. No por nada se destruyeron familias enteras, cuyos integrantes a veces tenían 4 o 5 años. Es importante hablar caso por caso para que no vuelvan a decirnos que fueron excesos, fue un plan sistemático, fueron 30mil detenidos desaparecidos en nuestro país».

Por otro lado, la concejala habló del Siluetazo: «Este año cumple 30 años el siluetazo, una actividad que comenzó como un simple hecho de recuerdo de los desaparecidos en Plaza de Mayo, y en 1994, compañeros se tomaron el trabajo de comenzar a reconstruir las edades, los lugares de pertenencia, y datos de aquellos a los que habían desaparecido. Nos parece importante que se declare de interés municipal, para que en San Isidro se recupere, esto es una actividad que se lleva adelante en escuelas, clubes, espacios públicos, el fin de semana estuvimos haciéndolo en el paseo de las bicicletas por ejemplo y muchas personas se acercaron».

Además, en esa misma sesión mencionó ser nieta de desaparecido: «Es importante que nos demos el lugar para concientizar, en mi caso particular tengo un abuelo desaparecido, de la localidad de Villa Adelina y no se que hicieron con él«.

LA HISTORIA DEL ABUELO DE SCHUPPISSER:

Sobre su historia, habló la propia concejala en un encuentro: «El Gordo La Fabiana le decían a mi abuelo. En septiembre del 77 el Gordo desaparece y mi mama y mi abuela tuvieron que continuar en la clandestinidad. Mi mamá iba con un documento falso al colegio, porque sabían que era la hija del Gordo, y mi abuela tuvo que trabajar de manera informal esos años. La dictadura sucedió no solamente para exterminar personas y pensamientos, sino también para desinstalar el Estado de Derecho».

Además, mencionó su pensamiento sobre un caso que causó revuelo ayer jueves: «No creo que el Presidente tenga que ver con el abuso a la compañera de HIJOS, pero si debe hacer algo y repudiarlo».

«Es importante, más allá de las reivindicaciones de la Memoria la Verdad y la Justicia, reivindicar el lado político de nuestros compañeros», concluyó la concejala, comentando la necesidad de efectuar políticas públicas de calidad y que lleguen a todos, como hubieran querido los 30mil.