Luego del asesinato de Eduardo Herlein, vecinos indignados y familiares de víctimas de la inseguridad se autoconvocaron a una marcha por redes sociales para reclamar por la inseguridad en la zona. Cuestionamientos al Intendente, a la Policía y al ministro Ritondo.
El martes, dos ladrones armados entraron a robar al comercio de Eduardo Herlein, ubicado el Artigas y Balcarce, en pleno corredor escolar de Ballester. Uno de ellos le disparó en la cabeza. Según los testigos, los delincuentes escaparon sin robar nada en el mismo auto en el que llegaron. El coche apareció abandonado en Villa Loyola, cercana al lugar del asalto.
La familia denuncia que el comerciante había sido amenazado por los delincuentes. Dicen que ya habían entrado a asaltar el local y que le habían dejado una advertencia: "La próxima te matamos".
El caso está siendo investigado por la fiscal Diana Mayko, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 7 del Departamento Judicial de San Martín.
El episodio tuvo gran repercusión mediática y alteró a los vecinos de Villa Ballester, que organizaron una convocatoria en la Plaza Roca el jueves por la noche.
Algunas horas más temprano se conoció que un sospechoso fue apresado con dos armas de fuergo en Villa Loyola, y que hay dos allanamientos a punto de realizarse para seguir buscando a los responsables. Sin embargo, la gente no tiene confianza en la policía, en el ministro de seguridad y hace fuertes cuestionamientos al intendente Katopodis.
Hubo más de mil personas autoconvocadas a través de redes sociales. Muy enojados. Expresaron sus dudas sobre la instalación de cámaras de seguridad y de los patrullajes municipales. Reclamaron porque ninguna de las decisiones políticas mejora la situación de seguridad en el barrio.
En la marcha en Ballester, se escuchó a algunos decir "que el intendente no les presta la atención necesaria al barrio. Hubo protestas por la gran presencia mediática que tuvo, junto al personal municipal, para buscar los restos de Araceli; y críticas por las ausencias en la zona comercial de Villa Ballester.