El ex presidente y actual titular del Partido Justicialista pensaba postergar los comicios, pero en las últimas horas habría decidido apurar el proceso para antes de fin de año.
Se sabe que a Néstor Kirchner no le gusta que le anticipen el juego. Tampoco a sus principales hombres en la Provincia, que venían trabajando en silencio la compleja interna del peronismo bonaerense. En principio existía un acuerdo para patear los comicios para el año próximo, pero eso podría aparejar protestas legales, y todo cambió en pocas horas.
En la noche del lunes, Daniel Scioli recibió en la Gobernación a los jefes de las bancadas peronistas en la Legislatura provincial y todos acordaron trabajar para que la interna del PJ se haga a fines de noviembre, antes de que venza el mandato de José María Díaz Bancalari como presidente del partido en la Provincia.
Se iniciaría así una etapa de reacomodamiento partidario con vista a las legislativas 2009. La posibilidad fue analizada informalmente en una reunión de jefes de bloques parlamentarios del Frente para la Victoria (FPV) en la residencia de la Gobernación.
La convocatoria había sido del gobernador Daniel Scioli para estimular la tarea legislativa del oficialismo, que acaba de aprobar una reforma impositiva en medio del conflicto con el campo, y en plena elaboración de cambios en el Código de Procedimiento Penal.
Entre el grupo de legisladores estaban el vicepresidente del Senado, Federico Scarabino; el presidente de la Cámara de Diputados, Horacio González; y los presidentes de los bloques del FPV-PJ, Osvaldo Goicochea (Senado) y Raúl Pérez (Diputados). También estaba el vicegobernador, Alberto Balestrini, que cuenta con el respaldo de Kirchner y Scioli para ser el candidato oficial para la presidencia del peronismo bonaerense.
Scioli prefiere no abordar criterios definitivos hasta que Néstor Kirchner no indique el camino. Tampoco estuvieron muy dispuestos a opinar en esa tertulia su ministro de Gobierno, Alberto Pérez, y el secretario General de la Gobernación, José "Pepe" Scioli.
Hasta el fin de semana pasado predominaba la idea de postergar el acto eleccionario para el año que viene, posiblemente en abril o mayo. No obstante, el aceleramiento de los tiempos políticos a partir de la formación de tendencias, agrupamientos y proyecciones personales en el transcurso del debate por las retenciones agropecuarias influye también en la provincia de Buenos Aires.
Las especulaciones aún son mayores porque uno de los actores más dinámicos de la oposición al gobierno nacional es Eduardo Duhalde. El ex presidente comenzó a explorar un armado alternativo al kirchnerismo y su cuota de poder histórico siempre fue el territorio bonaerense. Descuentan que Duhalde no irá en ninguna lista, pero existen prevenciones con su capacidad de movilizar voluntades.