
En la primer semana, después del acto de presentación de los Documentos no binarios, se registraron más de cien solicitudes de personas que querían esta nueva variante de DNI.
La palabra «no binario» se convirtió en algo que la gente buscó en Google desde 2014. Pero desde hace poco más de una semana que Argentina aparece entre los primeros resultados del buscador.
Es que el miércoles se entregaron los primeros DNI no binarios y nuestro país se convirtió en el primero de la región en adoptar una legislación así. Como pasa en Canadá, Australia y Nueva Zelanda. Pero en ninguna otra parte del mundo.
Siete días después del acto que encabezó Alberto Fernández en el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada, unas 100 personas en todo el país ya iniciaron la solicitud para tener el nuevo DNI «X».
Esa letra suma una tercera opción para quienes no se autoperciben con la «M» o la «F» del género masculino y femenino.
Sólo en territorio bonaerense hay 300 personas que esperaban el decreto para rectificar su documento. No hay una web o app para solicitarlo. El trámite promete tardar menos de dos semanas. Pero antes hay que cumplir una serie de pasos que llevan más días hábiles y que, por ahora, no son express.
«Primero se debe rectificar la partida en el marco de la ley de Identidad de Género, en un registro civil o en la representación consultar de Argentina en el exterior. Una vez que posee la partida rectificada, se deberá concurrir, llevando su nueva partida y DNI vigente, a cualquier oficina del Renaper o delegación de un registro civil en el interior, para realizar el trámite», explica Santiago Rodríguez, director del Registro Nacional de las Personas.
El tiempo de emisión es similar al de cualquier trámite de DNI. Dentro de los 14 dias en el trámite regular, o entre 24 y 96 horas en el trámite urgente.
«El DNU (el decreto que oficializó el documento ‘X’) lo que hizo fue adecuar el DNI para reflejar está realidad humana no binaria. Las personas no binarixs han existido siempre, no son una identidad «nueva». Explico esto porque luchan por visibilizar existir y ser reconocidas. Creemos que las nomenclaturas de un DNI no reflejan o expresan la totalidad de la experiencia no binaria, como tampoco la F o la M expresan del todo identidades masculinas o femeninas necesariamente, pero es un paso importantísimo y bastante audaz», pone en contexto Ricardo Vallarino, vocero de 100% Diversidad y Derechos.
«Lo que hay que saber, más allá de un documento «X», es que las personas NB (no binarias) no necesariamente utilizan el pronombre neutro. Pueden usar el masculino o el femenino. O, incluso, alternarlo. Los pronombres son importantes y es algo que la ley exige respetar, pero no son absolutos de la identidad para estos grupos».
Pasa lo mismo con las expresiones de género. «Comúnmente se logra superar algo así como una representación ‘andrógina’ o ‘neutra’, pero puede variar. Lo que pasa es que con frecuencia estas realidades se invisibilizan o son forzadas a encajar porque el sentido común es todavía muy binario. Eso está empezando a cambiar gracias a la resistencia y la potencia de las personas NB», dice Vallarino.
Acá entra la parte de la sociedad que aún con la «X» no se siente representada. Son quienes en el acto de presentación del DNI no binario dijeron «No somos una X» y exigen que el género en el documento quede sin completar. El llamado «campo abierto».