El ex ministro de Seguridad bonaerense dijo que la desaparición del testigo en el juicio a Etchecolatz es un mensaje para el Gobierno por su política de derechos humanos. Desde el 18 de septiembre de 2006 que no se tienen rastros del albañil platense.
El ex ministro de Seguridad bonaerense León Arslanian estimó que Jorge Julio López, testigo en el juicio contra el represor Miguel Etchecolatz, probablemente "está muerto".
"Después del tiempo transcurrido y de los esfuerzos para encontrarlo, yo creo que López está muerto", señaló Arslanian, al evaluar la situación del testigo desaparecido el 18 de septiembre de 2006, hace casi dos años.
Para el ex funcionario bonaerense, López es "víctima de los ex represores perseguidos ahora, un símbolo de estos represores frente a los juicios".
"Lo usaron como un desafío a las políticas de derechos humanos del entonces presidente Néstor Kirchner. Yo creo que, presumiblemente, está muerto. Después del tiempo transcurrido, de los esfuerzos para encontrarlo, creo que está muerto. Es hipócrita no decirlo. Sería como sostener que los desparecidos están en Europa", subrayó el ex ministro.
Arslanian sostuvo que la desaparición de López se trató de "un mensaje contra la política de derechos humanos del Gobierno, por la reactivación de los juicios (contra represores) y la anulación de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida".
El ex juez y ex ministro sostuvo además que durante su gestión se investigó "muchísimo" e "intensivamente" al entorno de Etchecolatz, pero reconoció que "no se llegó a elementos de cargo concretos" en el caso de la desaparición de López.
"Se investigó intensamente y muy bien, con gran cantidad de efectivos. Vivimos para eso durante meses", dijo.
Jorge Julio López desapareció el 18 de septiembre de 2006, poco antes de que se conociera la sentencia contra el ex comisario Etchecolatz.