
El gobernador bonaerense presidirá el acto conmemorativo a realizarse en J.L.Suárez. Los organizadores lograron ponerse de acuerdo para no concentrarse en distintos horarios, ni mostrarse divididos, a menos de cinco meses para las elecciones.
El flaco Kunkel se reunió ayer por la tarde con Dante Dovena para comentarle que había sido invitado como orador del acto del próximo sábado en José León Suárez por los fusilamientos del 56. Los diputados acordaron realizar un sólo acto a las 11 de la mañana y evitar el papelón de conmemorar este hito de la Resistencia Peronista con la dirigencia de San Martín dividida. Algo que llamativamente aún no se había resuelto a setenta y dos horas del mismo.
En realidad fue el concejal del FPV, Héctor Lanza, quien ayer al mediodía se llegó al Anexo de la Cámara, en nombre del grupo del Tiro Federal, para persuadir de manera directa a Kunkel para que hubiera un acto y no dos. Es que tanto el dovenismo como la Agrupación Lealtad y Solidaridad y Eduardo bustos por un lado, y Bitz, Bernasconi, Cuberos, Devoto, Lanza y Katopodis por el otro, estaban cursando invitaciones para el sábado a la misma hora sin siquiera comunicarse entre ellos por el tema del sonido, escenario, movilización y demás.
El Secretario de Turismo y Deportes bonaerense Miguel Cuberos confirmó a La NoticiaWeb la presencia del gobernador Felipe Solá y señaló que se cursaron invitaciones a diputados nacionales, Intendentes peronistas y el vicepresidente Scioli,como así también al senadora Cristina Fernández y al presidente de la Nación.
Solá será el principal orador del acto en que también hablarán el diputado Kunkel y familiares de las víctimas. Los distintos precandidatos a Intendente dejaron entrever que si habla Dovena, ellos hablarán todos delante de la multitud. Por lo que hay final abierto hasta el mismísimo día que se diriman estas cuestiones menores.
Al ser un día tan sensible a la liturgia peronista, los precandidatos ya decidieron que nadie llevará banderas y ni hará campaña delante de los familiares de las víctimas de la masacre que dio origen al terrorismo de Estado en la Argentina. Los hechos atroces y aberrantes consumados, reprimieron el intento de recuperación de soberanía popular encabezado por el General Valle hace 51 años.
Detenidos sin haber podido difundir la proclama contra la dictadura del general Pedro Eugenio Aramburu y el almirante Isaac Francisco Rojas, ese 9 de junio de 1956 el sueño liberador iniciado con las primeras sombras de la tarde terminó antes de la medianoche. Ni siquiera lograron interferir la transmisión de la pelea de Eduardo Lausse con el chileno Humberto Loayza para que el general Juan José Valle —jefe de la rebelión— leyera la proclama desde una escuela de Avellaneda donde se constituía el comando revolucionario. El mensaje incluía el compromiso de un llamado inmediato a elecciones y la garantía de una absoluta libertad de prensa, así como la libertad de todos los presos políticos, el reintegro de los derechos sindicales y la recuperación de la industria nacional.
"Tomar las armas para restablecer en nuestra Patria el imperio de la libertad y la justicia al amparo de la Constitución y las leyes", decía en los primeros párrafos ese texto en el que se percibía la pluma y visión de José María Castiñeira de Dios y de José María Rosa.
Más temprano en la mañana, entre las 8.30 y las 10 horas, concurrirán también como todos los años, el peronista de base, Pablo Puebla y Roberto Salar de Compromiso K a entregar unas ofrendas florales frente al monumento.