Ante la falta de candidatos de peso instalados en la oposición, el nombre de la ex presidenta toma fuerzas para el 2019. Tiene encuestas con números no desechables y en el actual contexto de crisis que atraviesa el gobierno, todo suma. Antes del escándalo de la ola de detenciones de funcionarios y empresarios ligados a la corrupción K, figuraban dos actos en agenda: próximo viernes en Cañuelas y el 11, en Ensenada.
Comienzan a calentarse los motores rumbo al 2019. Tal vez hoy con más potencia, certidumbre y seguridad que a comienzos de este año por parte de la oposición a raíz del difícil contexto económico y social que está atravesando la administración de Cambiemos. Como desde hace un tiempo, el futuro de Cristina Fernández de Kirchner es, tal vez, la incógnita que más desvela al mundo de la política. En base a ella, prácticamente se organizarán los demás espacios.
A más de un año para el próximo test electoral, algunos dirigentes comienzan a asomar y hacer públicas sus intenciones de competir por la sucesión del ejecutivo nacional, hoy a cargo de Mauricio Macri y Cambiemos. Entre ellos, se puede anotar a Felipe Solá y Agustín Rossi. Pueden agregarse otros, que no lo han dicho tácitamente, pero de algún modo u otro lo hacen: Juan Manuel Urtubey, Miguel Ángel Pichetto, Sergio Massa, José Manuel De la Sota y Alberto Rodríguez Saá.
En el caso de CFK, sería casi imposible imaginar una declaración de certeza de semejante calibre. La senadora nacional siempre ha jugado al misterio en este punto y, de anunciar candidaturas, lo ha hecho a último tiempo. También sabe que sería darle en bandeja lo que el oficialismo desea: polarizar con ella y el pasado. Por eso, el silencio de Cristina se expande también durante la etapa de gestión; todo lo que diga puede ser utilizado en su contra…y a favor de los intereses políticos de Cambiemos.
Más allá de la estrategia, sí ha comenzado una especie de nuevo operativo clamor por la ex Presidenta. Entre las certezas: podría aparecer en público, acto político mediante, un viernes del mes de agosto en un distrito de la Tercera Sección electoral.
Esto obedece a que circula la invitación para el 03 de agosto a un acto sindical del SMATA en Cañuelas o, la semana siguiente, a raíz del plenario de fuerzas cercanas a la Senadora a desarrollarse en la localidad de Ensenada que dirige Mario Secco.
Sea como sea, la tercera sección electoral es el sector del país, y sobre todo de la Provincia de Buenos Aires, dónde CFK conserva su núcleo duro de votantes, y por ende, donde mejores resultados ha obtenido. Es el área geográfica que inclina la balanza a su favor en detrimento de parte de la Primera Sección y el interior. De allí que muchos intendentes o candidatos a pelear por el puesto en territorio bonaerense, ligados al peronismo u afines, o más bien por conveniencia, ya comienzan a decir por lo bajo que de candidatearse Cristina se colgarían de su boleta para garantizarse su triunfo local. Desconfían de otro tipo de armado como el del Peronismo Federal con los gobernadores, Urtubey, Pichetto, Massa y Florencio Randazzo.
Por otra parte, cabe agregar que Unidad Ciudadana ha comenzado su armado a nivel nacional. La propia Cristina mantiene reuniones en privado con algunos dirigentes y esa fue la orden. El plenario en Ensenada del 10 de agosto está vinculado a ello. Incluso, su hijo, Máximo Kirchner, sería el encargado de cerrar el acto. La organización del mismo estará a cargo del Frente Grande de Secco; Nuevo Encuentro de Martín Sabbatella; el Partido de la Victoria de Diana Conti y Kolina de Carlos Castagneto.
La última aparición de CFK en un acto fue a finales del año pasado, el 28 de diciembre cuando en la localidad de Avellaneda, acompañada por el intendente Jorge Ferraressi, dejó una frase que muchos interpretaron como su alejamiento de la idea de ir por otra reelección: “Voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para que el 10 de diciembre de 2019 otro argentino esté en la Casa Rosada para conducir los destinos del pueblo”.
Será un abanico importante del espectro político el que aliente que ese otro al que hizo referencia, sea ella.